Nuestro ideario

Entendemos la educación como el trabajo que favorece el crecimiento y la maduración del alumno en estas dimensiones.

Trabajamos desde una relación interpersonal de escucha y acompañamiento del alumnado y de las familias.
Favorecemos el desarrollo afectivo desde la aceptación personal, la autoestima y el respeto a los demás.
Estimulamos al alumnado a la investigación ya la reflexión crítica. Creemos en el análisis, relación y síntesis como forma de adquisición de los conocimientos.
Fomentamos la educación de los hábitos saludables.

Atendemos a todos los alumnos/as respetando su diversidad.
Potenciamos el trabajo en equipo como herramienta de aprendizaje.
Creemos que nuestra escuela es un lugar donde la igualdad de oportunidades es una realidad, favoreciendo así una educación de justicia y solidaridad.
Valoramos el trabajo de nuestro alumnado según sus capacidades y esfuerzo personal.
Adoptamos el diálogo constructivo y la colaboración como facilitadores/as de la tarea educativa y como recursos útiles para promover la renovación de la escuela.

Pensamos que es necesario educar favoreciendo una actitud de servicio dentro y fuera de la comunidad educativa haciendo hombres y mujeres más abiertos y sensibles a la realidad.
Queremos una escuela en la que todos sus miembros despierten su conciencia ecológica y donde la responsabilidad personal nos haga discernir entre el uso y el abuso de los recursos naturales.
Pensamos que es imprescindible dar a conocer situaciones de injusticia, insolidaridad y violencia, como realidades a transformar.
Queremos educar a los futuros ciudadanos y ciudadanas en la responsabilidad, para que mantengan una actitud dialogante y crítica.

Creemos que toda persona es capaz de averiguar el sentido de la vida, encontrando satisfacción en el presente e ilusión en el futuro.
Consideramos esencial la dimensión ética y trascendente de la persona para promover su desarrollo integral.
Pensamos que la trascendente dimensión de la persona abre nuevos horizontes a la interpretación de la realidad.
Educamos a la persona favoreciendo que descubra y trabaje su interioridad.